SIEGA AGOSTO 2008 - CASTRILLO DE DUERO
PASOS DE LA SIEGA
Los hocines se afilaban para la siega.
El centeno se preparaba para segar.
Se abría la primera estaya.
Se cogía una manada.
Con el hocín se separaban las plantas, se cogían con la otra mano, se doblaban y cortaban.
Los más expertos utilizaban la uña para aumentar el grosor de la manada.
Si se realizaba una vuelta a unas pajas en torno a la manada y se utilizaba el dedo pulgar para hacer el nudo, se conseguía ir más rápido.
Una vez hecha la manada se apoyaba en el suelo con ayuda del hocín, para evitar que la paja se rompiera por el peso de las espigas.
Tres manadas posadas en el suelo formaban una gavilla.
Tres gavillas formaban un manojo y era el momento de atar.
Para atar se entresacaban unas pajas largas que se utilizaban a modo de cuerda.
Mientras unos avanzaban en el corte otros iban atando los manojos .
Los segadores avanzaban en una línea más o menos recta repitiendo los mismos movimientos.
Los manojos se repartían entre el rastrojo.
Los diferentes manojos eran apilados en un montón llamado morena.
La forma de apilar la morena era con el grano hacia dentro para protegerlo de la posible lluvia.
Antes de realizar la morena se cortaban unas ramas para aislarla del suelo en caso de lluvia.
Sobre las ramas, se iban colocando los manojos siempre con la espiga hacia el centro e inclinando los manojos a modo de tejado, para que en caso de lluvia ésta se resbalase por la paja y la espiga permaneciera seca.
La morena estaba ya acabada y en la tierra solo quedaba el rastrojo.
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